martes, 26 de julio de 2016

Los 4 jinetes del dolor: paracetamol, ibuprofeno, aspirina y metamizol. ¿Qué me tomo?


Y la respuesta sería: ¿y qué te pasa? . ¿A que la pregunta que da título a la entrada de hoy os resulta familiar?
 
¿Qué me tomo?

Estos cuatro jinetes de la Apocalipsis del dolor  los utilizamos de una manera frecuente en nuestro vida, les tenemos en casa, probablemente en algún bolsillo de alguna chaqueta o pantalón y en el bolso de alguna de nosotras. ¡Estoy segura que no falta!. Aunque comparten la cualidad de quitarnos el dolor, no son lo mismo, ni sus propiedades y efectos secundarios son iguales. Por ello, vamos a intentar desgranar las virtudes y efectos secundarios de estos guerreros del dolor.

Aspirina, paracetamol, ibuprofeno y Nolotil.



El primer jinete, el paracetamol, conocido como Gelocatil, Termalgin, Efferalgan y por supuesto nuestro querido y "salvador" Apiretal, posee dos cualidades que le hacen ser maravilloso:

·        Analgésico: Quita el dolor, inhibiendo la síntesis de prostaglandinas a nivel cerebral.
·        Antipirético: Baja la fiebre.


Hay múltiples opciones de dosis (500mg, 650mg, 1g)  y presentación (comprimidos, supositorios, sobres...etc).


El paracetamol se debe utilizar para dolores de cabeza, bajar la fiebre, el dolor de muelas, la gripe, el malestar general o la gota. No funciona con dolores musculares, ni artritis, ya que no reduce la inflamación. Sin embargo, no debemos abusar de él, porque su uso prolongado puede dañar el hígado y los riñones. Por ello, tampoco se usará si padecemos patologías relacionadas con esos dos órganos.

El ibuprofeno, también llamado Neobrufen, Espidifen, Dalsy (en niños) y otros muchos nombres comerciales más, es el jinete del dolor de la triple A:

·        Analgésico
·        Antipirético
·        Antiinflamatorio

Suena maravilloso, ¿verdad?. Pero tiene un inconveniente, daña el estómago. Conviene tomarlo con la comida y si su uso es prolongado es recomendable utilizar un protector gástrico. 

Está contraindicado en personas que sufren de úlcera gástrica y alteraciones renales. Al igual que el paracetamol su forma de presentación es muy variada desde comprimidos a efervescentes, pasando por un múltiple abanico de opciones. 

Las dosis habituales suelen ser 400mg y 600mg.  Cabe destacar la combinación del ibuprofeno con la Arginina. La Arginina actúa como un vehículo (entiéndase como un Ferrari) para el ibuprofeno, haciendo que su acción sea mucho más rápida. 
El ibuprofeno se recomienda utilizar en dolores moderados de cabeza (no migrañosos), dolores menstruales, dolores articulares y musculares, dolores dentales, esguinces, fiebre…etc.


La aspirina, de la cual ya hablamos en este post, es el jinete más avispado, posee 4 cualidades:

·        Analgésico
·        Antiinflamatorio
·        Antipirético
·        Anti-agregante plaquetario.

Cuando tenemos un daño en alguna parte del cuerpo, las células encargadas de responder a ese dolor fabrican la enzima ciclooxigenasa-2, que a su vez produce la prostaglandina. La aspirina lo que hace es evitar que la ciclooxigenasa-2 fabrique tal sustancia en la zona de donde proviene el dolor. Esta sustancia también provoca que la zona dañada se inflame, por lo que, el ácido acetilsalicílico actúa a la vez, disminuyendo el dolor y la inflamación.

El efecto antiagregante plaquetario de la aspirina hace, como decíamos antes, que no se acumulen las plaquetas en los vasos sanguíneos. Por ello, reduce el riesgo de que se produzcan coágulos que impidan el paso de la sangre y deriven en ataques cardíacos o cerebrovasculares. Sin embargo, hay estudios que han encontrado que este riesgo se reduce en personas que ya hayan tenido un episodio de ese tipo, y no previene patologías en personas sin afecciones cardíacas.

La aspirina está indicada para dolores de cabeza, musculares, aquellos producidos por la artritis reumatoide y otras enfermedades autoinmunes, y para bajar la fiebre y la inflamación. 

No está indicada para personas con problemas de estómago, enfermedades que causen sangrado excesivo, como la hemofilia, o las personas con gota o asma. No debe administrarse tampoco a niños menores de 14 años. También existen personas alérgicas al ácido acetilsalicílico, que deben sustituir ese medicamento por paracetamol o ibuprofeno.

El metamizol, conocido por todos como Nolotil, posee tres cualidades:

  • Analgésico.
  • Antipirético
  • Espasmolítico: Quiere decir que calma el dolor visceral (cólicos nefríticos, cólicos biliares...) y el dolor por espasmos musculares. 

Es un error pensar que el Nolotil es "más fuerte" que el ibuprofeno. El Nolotil no tiene propiedades antiinflamatorias, por lo que no va a producir daño gástrico. Su efecto secundario más frecuente es la Agranulocitosis. Vaya palabreja, ¿eh? Simplemente quiere decir, que tomado de una forma continua durante un periodo largo de tiempo puede producir una disminución de la producción de glóbulos blancos. En cristiano: baja las defensas. Otro efecto secundario del Nolotil, y más inmediato que la agranulocitosis es la hipotensión (baja de tensión), sobre todo cuando se administra por vía parenteral.


Salvo las contraindicaciones de las que hemos hablado son 4 medicamentos que se pueden usar con seguridad. Se debe utilizar siempre la dosis menor  con la que consigamos el efecto deseado. Por ejemplo, la dosis habitual en España de Ibuprofeno en un adulto es de 600mg, pero en muchos países de Europa, se utiliza la dosis de 400mg, con buenos resultados.

Hay estudios actuales que han demostrado que pacientes a los que se les administra la dosis de 400mg de Ibuprofeno responden satisfactoriamente al dolor. Es decir, si conseguimos la misma eficacia con menos dosis, produciremos un menor daño en el estómago.


Debemos saber que la mezcla de estos medicamentos no suma el efecto analgésico de los mismos. Además, mientras los estemos tomando debemos estar alerta y no consumir alcohol, pues aumenta el riesgo de sufrir hemorragias digestivas, y aumenta el efecto dañino de las mismas sobre el hígado. Espero haber aclarado las diferencias de estos 4 guerreros del dolor.



Cuando tengas un dolor persistente SIEMPRE consulta con tu médico, y es recomendable, si no te lo ha recetado ya, preguntar por un fármaco de rescate, en el caso de que el dolor te resulte incontrolable a pesar de la medicación pautada.




Fuentes y bibliografía:

  1. www.elsevier.es
  2. www.kernpharma.es
  3. www.portalesmedicos.com
  4. www.sietediasmedicos.com
  5. www.medicalpress.es
  6. www.doctoralia.es

8 comentarios:

  1. ¡Muy interesante! Me ha gustado mucho el artículo pues cada vez que me tengo que tomar un sobre de algo me leo de arriba a abajo las indicaciones, pero muchas veces me dejan igual que estaba.

    Lo de bajar las dosis me parece una medida correcta, ya lo había leído hace tiempo y había bajado de 1g a 650, pero no sabía que lo había de menos, la próxima vez que vaya a la farmacia lo pediré.

    Y por último una duda, había oído hace muchos años que cuando tienes dolores menstruales esta desaconsejada la aspirina y nunca me la he vuelto a tomar en estos casos, por lo que comentas en el artículo parece lógico, ¿Pero es cierto?

    Gracias!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Marta! Gracias por tu comentario! Como bien dices la aspirina esta desaconsejada para los dolores menstruales ya que puede producir un mayor sangrado. Me alegro que te haya resultado interesante la entrada! Bss

      Eliminar
  2. Que interesante tu apreciacion sobre los analgesicos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Impregnata! Bienvenida al blog! Muchas gracias por tu comentario, me alegro que te haya resultado interesante! Un saludo!

      Eliminar
  3. Hola si tome un par de aspirinas cuanto tiempo después puedo tomar metamizol

    ResponderEliminar