martes, 13 de septiembre de 2016

El mal llamado Síndrome Post Vacacional.

Llegó Septiembre y con él la vuelta al trabajo, la vuelta al cole...la vuelta a la "normalidad".

Se han acabado las vacaciones, un año más comienza el curso. ¿ No os da la sensación que el inicio del curso es como si comenzara el año? A mi sí...¡Como cuesta comenzar a coger ritmo! Nos sentimos cansados antes de empezar a trabajar. Solo con pensarlo sentimos ansiedad o stress al visualizarnos en nuestro puesto de trabajo, con los papeles que dejamos a medias, los papeles que han venido de vete tú a saber donde, con los que tienen que llegar....sudores, dan sudores... es el MAL llamado Sd. Postvacacional. Sí, sí, digo MAL llamado porque de síndrome tiene poco. 

Es un trastorno adapatativo. No se puede considerar, hoy por hoy, una enfermedad ya que no existe un consenso científico para poder denominarlo síndrome con las connotaciones que ello implica. 
Se considera que este trastorno adaptativo es producto de que en parte en nuestro entorno, el trabajo, se tiene como una actividad negativa, sacrificada y obligada. 



Hay sociedades en las que se considera el trabajo como algo creativo y digno para el ser humano. En estas sociedades el stres posvacacional no existe.

¿Y por qué se produce este proceso adaptativo? Volver de las vacaciones implica: cambios de horarios, retomar obligaciones y alteraciones en el estilo de vida que hemos estado llevando. Todo ello lleva intrínseco un proceso de adaptación que en algunos casos llega a ser más intenso de lo normal, llegando a producir en las personas que lo sufren molestias físicas, emocionales y psicológicas. En algunos casos la presión de la vuelta al trabajo llega a ocasionar cuadros de stress agudo, con manifestaciones físicas, del comportamiento y emocionales como pueden ser:

  • Malestar general
  • Irritabilidad
  • Sudoración
  • Depresión
  • Tristeza
  • Cambios de humor
  • Taquicardia
Si estos cambios perpetúan más allá de unos días ( 8-10 días) pueden crear un verdadero síndrome de ansiedad generalizada o stres crónico. Ambas patologías presentan una clínica específica y un tratamiento en concreto.

¡OJO! No se puede confundir con una desgana puntual o que se prefiera estar de vacaciones antes que trabajar.

En general, tener una actitud positiva siempre ayuda. En estos momento es importante mantenerla y no recrearse en la sensación de malestar que produce la vuelta al trabajo. Es decir no demos demasiada importancia a " estos síntomas" pasajeros.

En la mayoría de las personas la vuelta a la rutina laboral no supone un trastorno ya que vuelven con ilusión, especialmente quienes disfrutan de actividades gratas, creativas y con un desarrollo en las relaciones socio-laborales satisfactorias.

Retomemos las obligaciones del resto del año, aprovechando la carga de energía y la sensación de bienestar que nos han reportado las vacaciones para proponernos nuevas metas, tanto en el terreno laboral como personal. 


¡Ánimo a todos y feliz comienzo de curso!



Fuentes y bibliografía:

  1. www.psiquitría.com
  2. www.mapfre.es
  3. www.isepclinic.es


lunes, 5 de septiembre de 2016

Espinacas con piñones y bechamel

Aquí os traigo un plato delicioso y fácil de hacer. Receta de mi santa madre. Como os decía en esta entrada, va a comer espinacas hasta el que más las aborrezca en casa. Vamos al lío!

Ingredientes:

  • 1 Bolsa de espinacas grande.
  • 3 Filetes de pechuga de pollo.
  • 1 Paquete de taquitos de jamón.
  • 4 Dientes de ajo gorditos.
  • Un puñadito de piñones.
  • Para la bechamel necesitaremos: Aceite ( lo necesario para cubrir el fondo de la sartén), harina ( 3 cucharadas soperas), leche ( un cuarto de litro) y sal.
Modo:
  • Vamos a poner aceite en una sartén grande. Se pican los dientes de ajo en trocitos pequeñitos y se fríen en la sartén hasta que hayan cogido color.
  • Añadimos la pechuga de pollo cortada en trocitos y cuando ya estén doradas añadimos el paquete de taquitos de jamón. Rehogamos todo.
  • A continuación vamos poniendo las espinacas enteras o partidas (como prefieras) se rehoga nuevamente hasta que las ves tiernas. Retiras a un bol.
  • Añadimos un poco más de aceite a la sartén, y añadimos los piñones. ¡Cuidado! ¡Se tuestan muy rápido! Es cuestión de segundos. Una vez que están a nuestro gusto los retiramos a un plato pequeño.
  • Ahora vamos hacer la bechamel. Ponemos dos cucharadas de harina en el aceite donde hemos tostado los piñones, echamos la leche y mientras tanto estamos dando vueltas con una cuchara para que no se hagan grumos.
  • Montamos el plato poniendo primero las espinacas que teníamos retiradas en el bol con el jamón, la pechuga de pollo y los ajitos. A continuación echamos la bechamel y por último los piñones. ¡Están muy buenas!


Espinacas con bechamel y piñones en  Una Aspirina en la Alacena


Notas:

1. Es una receta muy versátil. Podéis no echar la pechuga de pollo, echar solo el jamón, añadir pasas en vez de piñones...
2. Si queréis hacer un plato menos calórico no añadir la bechamel.
3. La bechamel la podéis comprar ya echa, siempre de buena calidad, para este plato, sirve perfectamente. También si os resulta más cómodo la podéis hacer en la Thermomix. ¿La receta en la Thermomix? Aquí os la dejo.

Bechamel con Thermomix:

Necesitaremos:
  • 70ml de aceite de oliva
  • 30 gr de cebolla ( opcional)
  • 70 gr de harina
  • 600ml de leche entera
  • Pimienta, sal y nuez moscada al gusto.
Modo:
  • Pon en el vaso el aceite y la cebolla ( puedes hacerla sin cebolla) y programa: 3 minutos, Varoma velocidad 3 y medio.
  • Añade la harina y rehoga 1 minuto, 100º, velocidad 2 y medio.
  • Incorpora el resto de ingredientes a tu gusto y programa 10 segundos a velocidad 6. A continuación vuelve a programar 7 minutos, Varoma, velocidad 4. !Ya está!